Lúcia de Jesus dos Santos (1907-2005) de Fátima, Portugal, creció para convertirse en una monja católica conocida como Sor Lucía de Fátima. Como cualquier niño de nueve o diez años, ella y sus dos primos afirmaron que la Virgen María se les apareció en el cielo sobre un campo donde estaban cuidando ovejas. Tal vez tuvieron una alucinación colectiva. Tal vez el fantasma de una persona que ha estado muerta durante 2.000 años y que está considerada por los católicos como la madre humana de un dios-hombre eligiera de verdad a tres niños portugueses para decirles lo que sus padres, familiares, sacerdotes y monjas habían estado diciéndoles toda su vida: Peca y te vas al infierno. Lúcia también afirmó que María les dijo tres secretos. En 1941, después de que sus primos hubieran muerto de gripe, Lúcia «reveló» dos de los secretos. Ella, sin embargo, mantuvo el tercer secreto oculto hasta que creyó estar en su propio lecho de muerte.
Los dos primeros secretos implicaban una visión del infierno y una profecía de que la Primera Guerra Mundial terminaría – buena señal en 1941 – y que si la gente no mejoraba habría otra guerra pronto. Récord perfecto, hasta el momento. En 1944, Lúcia anotó el tercer secreto cuando Dom José Alves Correia da Silva, el obispo de la diócesis de Leiría-Fátima, se lo ordenó. El tercer secreto fue sellado en un sobre que se abrió en el año 2000.
Un gran culto de seguimiento surgió de estas fantasías religiosas y peregrinos de todo el mundo todavía recorren un camino hacia Fátima para rezar, hacer penitencia y dejar dinero con la esperanza de un milagro. Muchos seguidores devotos estaban seguros de que María les había dicho a los niños que el mundo se iba a acabar. Pero quedaron profundamente decepcionados cuando se reveló que la esperada «profecía» o «visión» del día del juicio final, aunque apocalíptica en cierto modo, no dijo mucho más que ¡arrepiéntanse o se arrepentirán! La visión de la Hermana Lucía de flechas y balas matando papas, obispos y sacerdotes podría traer una sonrisa a algunos anti-clérigos, sin embargo. Lo que hay a continuación es una traducción de la «profecía» Fátima:
…. vimos del lado izquierdo de Nuestra Señora, y un poco más arriba, un Ángel con una espada de fuego centelleante en la mano izquierda, la que emitía llamas que parecía que iban a incendiar al mundo; pero que se apagaban al contacto con el esplendor que Nuestra Señora emanaba de su mano derecha hacia él: el Ángel, indicando la tierra con la mano derecha, con voz fuerte dijo: ¡Penitencia, Penitencia, Penitencia!. Y vimos en una luz inmensa que es Dios: “algo semejante a como se ven las personas en un espejo cuando pasan delante” un Obispo vestido de blanco, “tuvimos el presentimiento que fuera el Santo Padre”. Otros Obispos, Sacerdotes, religiosos y religiosas subir una escabrosa montaña en la cima de la cual había una gran Cruz de troncos toscos como si fueran de alcornoque con su corteza; el Santo Padre, antes de llegar, atravesó una gran ciudad en ruinas, y medio trémulo, con paso vacilante, afligido de dolor y de pena, rogaba por las almas de los cadáveres que encontraba en su camino; en la cima del monte, mientras estaba postrado de hinojos a los pies de la gran Cruz, un grupo de soldados le matan disparándole varios tiros de arma de fuego y flechas, del mismo modo murieron los unos después de los otros, obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas y varios seglares, hombres y mujeres de varias clases y posiciones. Debajo de los dos brazos de la Cruz estaban dos ángeles cada uno con una regadera de cristal en la mano, en las cuales recogían la sangre de los Mártires y con ellas irrigaban las almas que se acercaban a Dios. *
Lúcia era una persona que vivía en un «mundo delirante de fantasías infantiles» y que había «sufrido alucinaciones religiosas.» Es así como el ex-fraile Mario de Oliveira la describió (Sunday-Times, Reino Unido, 29 de junio de 2000). Oliviera fue mucho más lejos en sus afirmaciones, acusando a los clérigos de Ourem y a la Iglesia Católica por abuso psicológico. El Padre Mario de Oliveira afirma que los dos niños que murieron de gripe murieron debido al ayuno religioso. Fátima, dice, es un engaño que se mantiene vivo debido a la atención que se le dedica y al dinero que hace. * Lucía y sus primos ciertamente estaban delirando y la Iglesia Católica, sin duda, explotó sus delirios. ¿Fueron los niños de Fátima fraudes piadosos o víctimas inocentes de adoctrinamiento? Me inclino por lo segundo.
Lúcia era una monja carmelita de clausura de 93 años de edad, cuando el tercer secreto fue revelado al mundo. Al parecer, la vida de clausura, a pesar de su austeridad, no la mató. Cuando el tercer secreto fue revelado, el cardenal Joseph Ratzinger (más tarde convertido en el Papa Benedicto XVI), dijo que ella podría haber evocado su visión de los libros devocionales. Según el Sunday-Times (Reino Unido, del 29 de junio de 2000), muchas personas en Portugal y de otros muchos lugares se enojaron porque el secreto no era una profecía del fin del mundo, por lo que su reciente penitencia y contribuciones fueron innecesarias. Algunos traficantes de la conspiración creen que la tercera profecía es una falsificación, pero que la visión es tan genérica e insustancial para hacer ver que dicha visión parezca absurda incluso si es verdadera.
Ver también Lourdes y alucinación colectiva.
Para saber más…
Libros y artículos
Hume, David. An Inquiry Concerning Human Understanding,Section X «Of Miracles,» (1748), Bobbs-Merrill, Library of Liberal Arts edition.
La Señora de Fátima y el milagro del Sol – Livescience ¿Qué pasó en Fátima?
¿Qué es lo que realmente pasó en Fátima? ¿Qué es lo que vieron los miles de periodistas y testigos? Podemos empezar por señalar que sabemos con certeza lo que no sucedió: El sol realmente no baila en el cielo. Sabemos esto porque, por supuesto, todo el mundo en la Tierra está bajo el mismo sol, y si la estrella moribunda más cerca de nosotros de repente hubiera empezado a hacer gimnasia celestial algunos miles de millones de personas de otras partes del mundo seguramente lo habríamos reportado. En realidad no es algo que nadie más pudiera no haber notado.
Esto sugiere que la experiencia fue algo más. En su libro, Nickell sugirió que la gente vio un parhelio (sundog, en inglés), una mancha de luz que a veces aparece junto al sol. Los Sundogs son estacionarios, sin embargo, por lo que eso no explica por qué las personas creyeron ver al sol en movimiento. Así que tal vez la «danza del sol» apareciera en la mente y las percepciones de los peregrinos presentes – no en los cielos por encima de ellos. Debe, por lo tanto, ser una explicación psicológica, y de hecho podemos encontrar una: una ilusión óptica causada por miles de personas que buscan el cielo, esperando, esperando, e incluso rezando por alguna señal de Dios. Por supuesto, es peligroso mirar directamente al sol, y para evitar dañar su vista, los de Fátima ese día estaban buscando en el cielo alrededor del sol, que, si lo haces lo suficiente, puede dar la ilusión de que el sol que se mueve como agotamiento de los músculos del ojo.
El hecho de que diferentes personas experimentaran diferentes cosas – o nada en absoluto – es también una fuerte evidencia para una explicación psicológica. Nadie sugiere que los que dijeron haber visto el Milagro del Sol – o cualquier otro milagro en Fátima o en otro lugar – estén mintiendo o timando. En su lugar, muy probablemente experimentaron lo que decían, aunque esa experiencia se llevó a cabo sobre todo en sus mentes.
Las mentiras de Fátima – Philip Cohens
El milagro de Fátima – Psychology Today
El fraude de Fátima – Miaclesceptic.
Iluminando sobre el “milagro del Sol” de Fátima – Skeptoid
Los secretos reales de Fátima – Joe Nickell (CSICOP)
Noticias
En Fátima, la gente enferma y se muere. (13/5/20007) Más de un millar de personas han sido atendidas por los servicios médicos en el santuario portugués de Fátima este fin de semana, y de ellas un centenar han tenido que ser evacuadas a centros sanitarios, durante los actos conmemorativos del 90º aniversario de las supuestas apariciones de la Virgen María a tres pastorcillos. Uno de los peregrinos, un ciudadano español de 80 años, murió el sábado antes de ingresar en el hospital Santo André.
Fátima, como otros santuarios marianos, es famoso por sus curaciones milagrosas, demostradas sólo a ojos de la Iglesia. Que yo sepa, nadie ha dejado tiradas allí prótesis de brazos y piernas, por ejemplo, y ha vuelto a casa con el nuevo miembro crecido por la gracia divina. Ese tipo de curación convencería hasta al más incrédulo y evitaría los habituales informes médicos de más que dudoso rigor, pero no se ha dado hasta ahora ni en éste ni en otros lugares de culto.
Lo de este fin de semana, sin embargo, va más allá. No sólo es que no haya curaciones milagrosas, es que en Fátima la gente enferma y se muere. Y todavía habrá quien se gaste el dinero en peregrinar al lugar con la esperanza de curarse de cualquier cosa, para fortuna de las agencias de viajes y de los comerciantes locales.
Miles esperan la aparición de Knock. (2009) Joe Coleman, un dublinés que se imagina a sí mismo como clarividente porque sufrió un OBE, predijo que la Virgen María aparecería en la antigua iglesia parroquial en Knock. Una multitud estimada en más de 5000 apareció, algunos afirman que pudieron ver al brillante sol cambiando de color y el bailando en el cielo, lo cual tomaron como una señal del cielo. Lo que no cuentan los religiosos más devotos es que numerosos casos de perdida de visión se produjeron debido al “acontecimiento”. La metamorfopsía no es un hecho milagroso, por mucho que así o interprete la iglesia con Fátima o Coleman con Knock.
