Un delirio es una falsa creencia que persiste a pesar de la abrumadora evidencia en contra de ella.
En este diccionario el término no se utiliza para designar el síntoma de un trastorno psiquiátrico. En términos generales, las creencias que yo llamo delirios son aquellas que he encontrado y que son inmutables pese a la cantidad o la calidad de las evidencias contrarias a ellas, defendidas enérgicamente por el pensamiento selectivo y, al parecer, adheridas principalmente por motivos emocionales.
Obviamente, la gente no está de acuerdo en cuanto a qué constituye una «evidencia abrumadora«, así que cuando se utiliza la palabra ‘delirio’ para describir la creencia en dioses, espíritus, psi, en la Cienciología, etc, estoy expresando un juicio de valor acerca de la evidencia empírica y lógica para apoyar esas creencias. No quiero decir, sin embargo, que las personas que tienen esas creencias sean enfermos mentales o estén dañados psicológicamente.